Búsqueda rápida

lunes, 27 de febrero de 2012

La encrucijada: debacle alemana en el frente oriental

Otra muesca para las glorioso pueblo soviético
Espléndida partida de Flames of War la que jugamos este viernes en el Club Alpha Ares de Barcelona. Los alemanes del mariscal Tresachen y el apoyo divisional de las SS de Von Joseph Gutierren se enfrentaron a las heroicas y valerosas fuerzas del indomable pueblo soviético. El general Alarconov dió la orden al comisario político segurovich de que capturase el pequeño pueblo de Tchaikov desde el que se controlaba una encrucijada de carreteras de vital importancia para la logística rusa. Se esperaba una importante presencia alemana en el pueblo. La compañía de presidiarios que recibieron la misión de tomar el pueblo deberían estar preparados para duros combates y una resistencia encarnizada. La inteligencia soviética había alertado de la presencia de dos koenigstiger y de una columna alemana de blindados pesados e infantería mecanizada que avanzaba para reforzar las defensas nazis. Alarconov apoyó el ataque soviético con gran cantidad de ISU 152, algunos Josef Stalin y una compañía de T34/85. Tchakov debía tomarse a cualquier precio!

La compañía de castigo soviética aparece en unos almacenes de grano al oeste apoyados por una unidad de cazacarros
Tresachen contaba con una compañía de ingenieros atrincherados en el pueblo y en un bosque cercano. Esperaba una asalto de infantería por el oeste, probablemente apoyado por carros así que situó sus tres paks y su artillería encarando esa posible amenaza. El Alto Mando había informado de la presencia de importantes columnas de blindados rusos que se acercaban por el este. Tresachen ubicó sus dos koenigstiger y un anticarro cubriendo el este.

Las defensas alemanas del oeste
La compañía de castigo comandada por Segurovich vigilaba el pueblo de Tchakov desde unos almacenes de grano bien cubiertos por frondosos bosques. Alarkonov había dado la orden de tomar aquel maldito pueblo. Se esperaba una resistencia durísima y siempre que esto pasaba se recurría a nosotros. A los descastados, a los parias. Nadie nos recordaría si moriamos pero si lograbamos el objetivo seriamos libres. Nuestra moral estaba por las nubes, sabiamos que muchos no verían el sol mañana pero...¿Qué importaba eso? Seriamos libres y habriamos pagado nuestra deuda con el pueblo soviético y el camarada Stalin. Hasta el último hombre, ni un paso atrás... ¡Hurraaaaaaaaa!

Tchakov. Al fondo la artillería. Los paks y la infantería intentarían aguantar el asalto inminente
El clamor de los soldados rompió el silencio del bosque. El jubilo invadió a toda la unidad al comprobar que no estaban solos. El sueblo temblaba y el rugido de los motores diesel de una columna de ISU sirvió de señal. Los blindados habían llegado era la hora de vencer o morir. Una gran columna de cazacarros ISU se había parapetado en los bosques del este. Desde cobertura podían ver a las bestias mecanizadas alemanas. Debían esperar a que la infantería lanzase su asalto. En ese momento con el apoyo de una compañía de T34/85 avanzarían hacia el pueblo en un movimiento de pinza para acabar con los koenistiger y apoyar el ataque de la infantería.
Una compañía de ISU 155 busca cobertura al este esperando la llegada de los T34/85.
Los Koenigstiger debían aguantar la oleada de blindados hasta que llegará el apoyo divisional. Los rusos no tenían nada capaz de penetrar su frontal y estarían obligados a cogerlos de flanco. Estas bestias mecánicas aterraban a cualquiera
La alarma inundó el pueblo de Tchakov. El observador alemán había avistado una columna de carros soviéticos y una gran compañía de infantería que se acercaba en cobertura por los bosques. Los soldados corrieron raudos a ocupar sus posiciones. Las defensas eran poderosas pero tenían un punto débil: no tenían HMG. El atronador rugido de los carros y el sonido de las orugas se hacía más fuerte a medida que los soviéticos se acercaban. El asalto era inminente. Los ingenieros alemanes pudieron ver los primeros ISU que se acercaban al puente. En ese momento los carros se detuvieron y comenzaron a disparar sus potentes cañones. Los alemanes respondieron con fuego de artillería y disparos de sus antitanque. Pero la amenaza más seria era la infantería. Se había avistado una gran horda pero no había ni rastro de ella.

La infantería avanza en cobertura mientras los Tigers destrozan un ISU desde la retaguardía. Fue una sorpresa inesperada
La llegada de los Tigers hizo estragos pero su propia destrucción ralentizó su movimiento. Los carros soviéticos bloqueaban
el puente y la carretera. Los Tigers deberían atravesar terreno difícil y no llegarían a tiempo para impedir el asalto soviético
Los soldados soviéticos avanzaban con sigilo a través de los bosques al amparo de la cobertura y llegaron hasta el linde del poblado sin recibir bajas. La compañía era numerosa y se refugiaba en todos los bosques de los alrededores esperando la señal para lanzarse al asalto. En ese momento una salva de cañonazos hicieron astillas un ISU que quedó atravesado en el puente imposibilitando la circulación por carretera. Una columna de Tigers al mando de Joseph Von Gutierren había llegado por retaguardia para romper el cerco de Tchaikov. Habían burlado todas nuestras defensas y se habían presentado por retaguardia. Los poderosos cañones abatieron a dos ISU  aprovechando el débil blindaje lateral y el resto de la unidad debió maniobrar para buscar cobertura. Los dos ISU restantes iniciaron un cañoneo contra los poderosos Tigres mientras éstos con sus ametralladoras barrían la retaguardía de la infantería soviética.

La infantería soviética cruza el río en masa sin sufrir bajas mientras que los ISU se comen los cañonazos alemanes. Los supervivientes maniobraron en busca de cobertura. Y los Tigers avanzaron hacia el pueblo dejando vivos un par de ISU. Este error lo pagarían caro.
Los defensores gritaron victoria al ver a sus Tigers haciendo mucho daño en las líneas rusas. La verdad es que era un daño menor la infantería casi no tenía pérdidas y se había puesto a salvo al amparo del bosque. Gracias a ésto llegaron a posiciones de asalto casi sin pérdidas. El mayor enemigo de los alemanes era el tiempo. Los Tigers debían apresurarse y cruzar el río pero un blindado destruido bloqueaba el puente y esto les obligaría a atravesar terreno difícil y cruzar por el río helado ante el fuego de los cazacarros soviéticos supervivientes que ya se habían reorganizado. El mariscal Tresachen decidió reposicionar sus paks para reforzar la posición de los koenigstiger que deberían hacer frente a una gran oleada de tanques rusos. Las bestias mecanizadas alemanas salieron del pueblo en busca de los blindados soviéticos mientras las dotaciones de los cañones reposicionaban las baterías.

Algunos Tigers comienzan a atravesar los bosques mientras los ISU supervivientes practican tiro al pato
Tresachen había dejado a Von Gutierren el peso del combate en el flanco oeste. Había subestimado a los rusos y lo pagaría caro. Una llamada del Alto Mando alemán sonó en el puesto de mando de Tresachen en Tchaikov. Avisaban de la llegada de gran cantidad de carros rusos e instaban a que tomase una posición defensiva para repeler un posible asalto de infantería. Tresachen ante el éxito de los Tigers hizo caso omiso y respondió con un: "Tranquilo señor, lo tengo todo controlado" al colgar el teléfono todos sus planes se hicieron trizas.

Los koenigstiger iban a ser rodeados sin remisión y su blindaje lateral era vulnerable
De los bosques de los alrededores se escuchaban potentes cánticos entonando la varsoviana. Los alemanes estaban aterrados por las voces debían ser muchos y Tresachen había dejado en bragas todo el ala oeste. No tenían HMG para repeler a la infantería pero Tresachen insistía en que esa chusma no era rival para las tropas alemanas. "Lo tengo todo controlado".

¡Por la madre Rusiaaaaa! ¡Hurraaaaaaaaaaaaaaaaaaa! Miles de rusos se lanzaron a por las trincheras desde los bosques. A Tresachen se le salieron los ojos de las órbitas cuando los lanzallamas de avanzada achicharraban a su infantería avanzada. Los ingenieros del bosque recibieron de todo. Tras las llamas sufrieron una salva de fusilería mientras entre el humo y la niebla los primeros rusos corrían al asalto a bayoneta calada. Los alemanes no puedieron contener tal oleada y se retiraron tras los muros del pueblo con graves pérdidas.
Los héroes del pueblo ruso barren las defensas alemanas y con el puño en alto claman al cielo por la victoria.
Esta fue la señal. En el ala este los blindados soviéticos hicieron la pinza sobre los koenistiger que habían avanzado a lo loco e imprudentemente. Su frontal era imposible de atravesar pero en campo abierto serían rodeados por simple superioridad numérica y sus costados serían presa fácil para los blindados soviéticos. Cuando los carristas vieron la marea de chapa y cañones que se avalanzaba sobre ellos intentaron realizar un movimiento desesperado de sturmtruppen para ponerse a cubierto pero no fue suficiente. Algunos Josef Stalin se hundieron bajo el hielo que se resquebrajó bajo su peso, pero la mayoría cruzó el río y comenzaron a batir los laterales del orgullo blindado alemán mientras una masa ingente de T34/85 hacían lo propio desde el otro lado. El fuego defensivo de los koenigstiger no hizo nada y los dos cayeron sin remisión.
Los koenigstger estaban perdidos

Jaimovich demostrando su patriotismo mientras sus
carros le contaban un chiste a los koenigstiger
La marea rusa libera el pueblo
Mientras los paks que deberían haberles dado apoyo aún se estaban reposicionando por un grave error de despliegue inicial. El ataque ruso funcionaba como un engranaje suizo. Los koenigstiger estaban destruidos y los blindados soviéticos se dirigían hacía el pueblo mientras la infantería soviética realizaba un segundo asalto que barrió a los defensores. Muchos rusos valerosos cayeron ante el fuego defensivo pero el honor y la defensa de la patría eran motivos más que justificados para sacrificar sus vidas. Eran héroes. Sus compañeros pasaron por encima de sus cuerpos y ajusticiaron a los defensores. No dejaron supervivientes y pasaron por la bayoneta a todos los perros esclavos del Fuhrer. La marea soviética eran incontenible, en un abrir y cerrar de ojos habían barrido a la infantería del ala oeste y estaban desmantelando la artillería mientras una masa ingente de tropas se avalanzaban sobre los paks y sus dotaciones. Éstos levantaron sus manos y se rindieron pero no iba a haber perdón para ellos.
Los koenigstiger destruidos por los carros rusos
 Se les condujo al centro del pueblo y se les fusiló como dictaban las ordenanzas y las arengas del comisarío político. Pero todavía no estaba todo ganado, una compañía de infantería mecanizada alemana había llegado y se disponía a realizar un asalto combinado sobre el pueblo. Los rusos se atrincheraron y esperaron. El pueblo estaba tomado y los carros soviéticos, sin oposición, se apresuraron a tomar posiciones para apoyar a la infantería ante el inminente asalto de los temidos Tigers de Von Gutierren.

Los blindados alemanes cruzaron el río y se disponían a desalojar a los rusos de Tchaikov y vengar a sus caídos pero un cañonazo que provenía de la retaguardia hizo astillas el carro que encabezaba la columna y todo el avance alemán se detuvo. Tresachen había apremiado a Gutierren a cruzar el río y este olvidó acabar con los ISU supervivientes. Éstos ahora le hicieron la misma jugada disparando desde cobertura por la retaguardía alemana.

El asalto a la desesperada de los alemanes fue repelido y muchos Tigers cayeron
"Nein, Nein" gritaba Gutierren. Tresachen estaba siendo descuartizado por las enfurecidas hordas soviéticas pero el brillante carrista no iba a rendirse fácilmente. Dió la orden de un asalto final con todo. La infantería bajó de los semiorugas y se dirigieron a un bosque cercano buscando una posición para asaltar desde cobertura mientras los Tigers pasaban por encima de los muros escupiendo fuego. Nuestros camaradas aguantaron por Stalin y la liberación de la patria. Un Tiger estaba a punto de aplastarlos bajo sus orugas pero en ese momento saltó en pedazos. Los blindados rusos habían llegado repartiendo furia y dolor entre los fascistas. Gutierren vió como su infantería retrocedía ante el avance de los blindados. Había perdido tres carros pesados y la batalla estaba perdida. Dió la orden de retirada dejando el cuerpo inerte de Tresachen que había sido empalado y cubierto con la bandera roja de la hoz y el martillo. ¡Otra victoria para el comunismo! Corrió el vodka entre los vencedores y algunas hermosas mujeres de Tchaikov se encargaron de curar todo tipo de heridas a sus libertadores.



El mando ruso. Su ímpetu, su coraje y su determinación vencieron a las mejor preparadas tropas alemanas

Los alemanes con caras de circunstancias y escocidos por la derrota. Somos buenos, los queremos y les dimos un poco de vodka.

Aspecto final de la victoria soviética

23:59 Los alemanes no sabían que contener una marea rusa sin HMG era imposible... y lo pagaron muy caro. Los paks apuntaban a donde no debían y cuando se quiso corregir fue demasiado tarde. Los Tigers llegaron por el lugar más apropiado pero un ISU destruido bloqueó la carretera y les obligó a perder muchos turnos atravesando bosques y ríos. Los generales alemanes se lo pasaron pipa al principio cuando destruían algunos carros soviéticos pero, como siempre, esas sonrisitas se fueron borrando a medida que la partida avanzaba. El ataque ruso funcionó como un reloj y fue implacable. Sacrificaron unos blindados a cambio de barrer todo el pueblo liquidando a todos los elementos alemanes inclusive los paks. Los tanques aplastaron los koenigstiger y sin oposición tomaron posiciones defensivas privilegiadas tras su infantería. Cuando los alemanes quisieron asaltar, simplemente no pudieron. El fuego soviético era superior.









No hay comentarios:

Publicar un comentario